Mi ruta salvaje llega hasta el centro del misterio, atraviesa el huracán y las tormentas para, finalmente, alcanzar el sosegado corazón de mi alma.
Nathan Hope

jueves, 25 de marzo de 2010

El apagón analógico


Esta es mi casa,mi hogar,la madriguera desde donde os escribo. Observáis un altillo de madera,unas fotos con rostros en el pasillo,una pared roja a la derecha,una lámpara encendida que perteneció a mi abuela y a la izquierda una televisión conectada donde en aquel momento se emitía no sé qué película. Esa televisión es la protagonista de esta entrada: He de reconocerlo.......me ha pillado el apagón digital(o analógoco o como se diga). No somos nadie. Ahora llego a casa,a mi hogar,a mi amada madriguera tras un día de trabajo y ya no me recibe Matías Prats o Ana Blanco para contarme que Esperanza Aguirre le ha pegado una puñalada a Mariano Rajoy,que a su vez ha llamado inútil a Zapatero,que ha su vez da un apretón de manos al presidente de la República Popular China tras firmar un tratado comercial por el cual aquel lejano país fabricará todavía más baratos los vaqueros que vestimos en esta anestesiada tierra. Ahora me recibe una pantalla en negro con una frase que reza: "Sin señal"
Pienso hacia mis adentros si es conveniente para mi salud mental volver a tener televisión y decido que mi salud mental la perdí en los ochenta así que, ni corto ni perezoso, me dirijo a una sucursal de ONO para que me cobren la pasta oportuna para poder disfrutar de nuevo de esa "flamante ventana abierta al mundo" que es la televisión.
Llego y,tras una mesa decorada con los colores corporativos de la empresa,me recibe una especie de "diosa siliconada del amor" por la que Adán hubiera ofrecido a Dios todo el costillar y por la que hoy,el ciudadano común contrataría todos los canales del planeta y pienso:
- Joder,los de ONO saben algo sobre esto del márketing.
Todavía no me he decidido pero creo que voy a contratar la oferta completa de 315 canales.De perdidos al río.

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