Mi ruta salvaje llega hasta el centro del misterio, atraviesa el huracán y las tormentas para, finalmente, alcanzar el sosegado corazón de mi alma.
Nathan Hope

jueves, 28 de octubre de 2010

Compro oro


Hoy, al volver de la compra, he abierto el buzón con esa actitud del que realiza algo tan intrascendente como cotidiano. Efectivamente, allí dentro seguía sin haber un contrato millonario con la agencia Reuters, tampoco había noticias de la devolución de hacienda, ni tan siquiera la invitación de algún amigo inconsciente que le había dado por contraer matrimonio(todavía quedan de éstos). Por el contrario había una carta de ONO avisando de la subida de las tarifas, otra de Adeslas recordándome que todavía debo dinero por la operación de menisco de hace un año y un folleto titulado “Compro Oro”. Dejé caer sobre la mesa todo aquello prescindiendo de meniscos, de televisión por cable y, sobre todo, de oro.
Había comprado todos los ingredientes para prepararme una comida que sólo podía ser superada por la siesta posterior. Pechugas de pollo de corral, yogurt de cabra, dátiles, curry, ajo, pimienta, cebollas tiernas y un Ribera del Duero con más cuerpo que Brad Pitt en “Troya”. No voy a entrar en detalles sobre el resultado ya que no estamos en un blog culinario aunque, como dice la expresión popular: “se caga la perra”. Nunca he sabido porqué motivo se puede cagar una perra cuando las cosas son satisfactorias pero parece que así es la cosa.
El asunto es que mientras devoraba aquel manjar he cometido el error de poner las noticias de las 15 horas en el momento en el que se daba la noticia siguiente:
“Durante el último año se ha duplicado el número de personas que acuden a las casas de caridad demandando un plato caliente. Actualmente unas 800.000 personas dependen de esta ayuda para poder come cada día”
- Joder! – pienso – Ochocientas mil personas son muchas personas.
En ese instante la aguerrida periodista (una becaria inflada de silicona) se dispone a entrevistar a un hombre que hace cola con cara de pena. El hombre debe tener unos cuarenta y tantos años, viste americana y pantalones a juego, va afeitado y bien peinado, no da el perfil del vagabundo que todos imaginamos. El hombre confiesa públicamente que hace un año le despidieron de un alto cargo en una multinacional, que su mujer le ha abandonado y se ha largado con los dos hijos al pueblo de sus padres, que el banco se había quedado con el piso y que había vendido hasta el coche.
En ese momento reparo en el folleto que hace unos minutos había recogido del buzón y vuelvo a leer: “Compro Oro”…problemas?,facturas?,estrés?” y me digo:

- Más de uno estará haciendo su agosto con esto de la crisis y más de dos estarán vendiendo la alianza, los pendientes del bautizo de las niñas y hasta le arrancarían las muelas de oro al cadáver de su madre para poder tapar los socavones.

Y con la intención de calmar la presión en el pecho que me han provocado las noticias,quito el telediario y pongo un viejo vinilo de los Creedence Clearwater Revival para ver si esos viejos hippis me alivian el alma. Pero de repente me viene a la cabeza que ese vinilo puede estar hecho con el petróleo de algún terrateniente tejano votante del “tea party” que con los beneficios de sus ventas ha pagado parte del ejército que invadió Irak para, precisamente, controlar el precio del crudo mundial. Allí, alguno de sus chicos violaron y mataron a diestro y siniestro convirtiendo a hombres que sólo pensaban en el cous-cous del sábado en bombas andantes y mientras esto sucede, el terrateniente, aprovechando la crisis que él mismo ha provocado, monta una serie de franquicias que compran oro por el mundo para fundir las muelas de las madres muertas y convertirlas en lingotes que guardará en la caja fuerte de algún banco de Abu Dhabi,donde los jeques árabes, ignorando toda fe que no sea la fe en el dinero, hacen reverencias y ponen un harén al servicio del votante del tea party el cual, cuando vuelva a Texas irá a misa y se cagará en toda la banda de gandules, negros y maricones que habitan en su país.
Coño,tendré que quitar el disco de la Creedance porque no me está haciendo ningún bien. Recurriré al viejo trankimazín porque el corazón me va a explotar. Pero es en ese momento cuando pienso que el mismo señor tejano tiene acciones en las multinacionales farmaceúticas y…….en fin, que hay días en que la cabeza parece un parque temático para intelectuales de izquierdas.

jueves, 14 de octubre de 2010

Demasiado tiempo


Como decía en la entrada anterior(que,por cierto,he escrito hace apenas dos minutos); al quedar aplazado mi viaje a Brasil lo que tengo ahora de sobra es tiempo,tiempo, tiempo...... Los próximos tres meses tengo todo el tiempo del mundo.Creo que por ese motivo tendréis en este blog entradas intrascendentes como ésta en la que recupero una fotografía de Londres sin nada que contar. Soy un tipo con mucho tiempo y una cabeza hiperactiva. Mala combinación.

Eterno presente


Hoy debería llevar un par de días en Brasil. Para ser exactos, en este instante debería estar sobrevolando el río Araguaia y la selva quemada de Matogrosso para aterrizar en Sao Félix . Pero una vez más la vida se ha encargado de demostrarme que no existe más que el aquí y ahora. Podemos trazar todo un plan de vida pero tarde o temprano la fuerza vital que mueve todo (y cuando digo todo me refiero a TODO) te dice: “Eh, amigo; quieto.¿Crees que vas por una autopista?,¿No has pensado que puedan resultar más interesantes los caminos secundarios o incluso las paradas en el camino para repostar?” Y aquí me tenéis,en una parada para repostar.
Hoy he escuchado a un compositor decir que la nota que más le seduce es el silencio entre notas. Supongo que lo mismo es aplicable a las acciones y los detenimientos. Ahora estoy en una pausa sonora dentro de mi particular partitura. Pensaba que el teatro estaba abierto, el público en su sitio y yo a punto de dirigir la orquesta y, mira por donde, el teatro permanecerá cerrado por reformas durante tres meses y este aprendiz de director tendrá que convocar a la orquesta para dentro de un tiempo.
Por motivos que aquí no vienen al caso se retrasa el rodaje del próximo documental hasta Enero. Durante este tiempo trataré de recordar el sinuoso trazado de aquel río, su densa humedad que parece emanar de la boca de un dragón, las bellas chicas que recorren su orilla seduciendo a los chavales, la lluvia torrencial y el sol abrasador, la cerveza helada y el idioma portugués; viviré este invierno europeo que está llamando a la puerta y trataré de amortiguar esta inactividad provocada por la crisis económica con lectura y estudio, con escapadas de la ciudad, con buen cine y buen vino y aceptaré, si llega el caso, que la vida vuelva a darme otra sorpresa.

domingo, 3 de octubre de 2010

Asesinatos conscientes



Tengo 46 años. Como muchos de los lectores,de niño me eduqué en la España oscura. Pasé 12 años en un colegio religioso y viví en una familia de una fervorosa fe en Dios(si os fijáis Dios todavía lo escribo con mayúsculas). De la iglesia lo que más me atormentaba no era el posible descenso a los infiernos si pecaba(¿cómo podría pecar un niño?). No; lo que más me molestaba eran las contradicciones entre aquello que me decía la iglesia que era bueno hacer(disciplina, humildad, sencillez, paz...) y lo que realmente hacían sus seguidores(orgullo, dispendio, tensión, arrogancia...).
De una institución religiosa, en aquellos tiempos, solo podías salir monaguillo o ateo convencido. Yo fui de los segundos y con la ayuda de algunos amigos(Nietzstche, Marx, Watts....)maté y enterré a Dios en el jardín de mi mente. Primer asesinato consciente. Me embarqué en la rebelión con la misma fe con la que mis educadores defendían a su creador. Pero el tiempo pasa y te das cuenta de que sustituir a Jesucristo por Bakunin significa no quitarse la venda de los ojos. Con dificultad me fui despegando del rostro aquello que no me dejaba ver más allá de mis propias narices y empecé a observar en mis compañeros "revolucionarios" las mismas contradicciones que tiempo atrás había detectado en la iglesia. Os pongo un ejemplo reciente. Viajando ayer por internet me topé con el blog de un fotógrafo cuyas posturas están cercanas al anarquismo,si es que no caen de lleno en él. Con mucha determinación defiende los altercados que se produjeron en Barcelona el día de la huelga general. Aboga por la revuelta, la barricada y el dinamitar toda esta sociedad capitalista y tirana. Y yo pienso: "OK. Quizás no estaría mal". Pero en cuanto veo las fotos que este fotógrafo realizó en la famosa manifestación veo que a pie de cada imagen está su nombre con el signo de copy right. Y entoces me pregunto: ¿No es acaso el copy right la forma de acotar en una imagen los derechos individuales frente a los colectivos?,¿no es el copy right la "sutil" forma que los creadores tienen de blindar su propiedad privada?,¿no es la propiedad privada contra lo que siempre ha luchado el anarquismo?......Joder Jordi,me digo;parece que la contradicción sigue siendo patrimonio de la humanidad en todos los bandos. Esto ya lo había confirmado hace muchos años y en su día también tuve que asesinar y enterrar a Bakunin junto al cadaver de Dios. Segundo asesinato consciente.El jardín se me iba llenando de muertos. Lo incómodo de matar a diestro y siniestro es que, tarde o temprano,el crimen sale a la luz de tu propia consciencia y te ves obligado a desenterrar,recomponer y maquillar los cadáveres que tan mal huelen en las esquinas de tu mente para ver si todavía puedes rescatar algo decente en ellos que te ayude a caminar en este pedregoso camino de la vida.
Así que aquí me tenéis montando un puzzle de miembros descompuestos,preguntándome si esta barba blanca y pestilente pertenece a Dios o a Marx(que,por otro lado,siempre tuvieron un sospechoso parecido físico).
Intenté poner un comentario en el blog del fotógrafo aludido pero la tecnología me lo negó. Como sé que tenemos conocidos comúnes,algún día recibiré una respuesta.Será muy bienvenida.