El día 2 de Diciembre haría un año que inauguré este blog.
La idea era crear un lugar donde no sólo me expresara yo sino que sirviera de plataforma libre y gratuita para que la gente pudiera dar su opinión. Soy el primer sorprendido al comprobar el número de visitas que han tenido lugar en este tiempo: 14.283. Pero al mismo tiempo soy el primer sorprendido al ver qué poca gente ha tenido el interés, la osadía o, si queréis, la falta de pudor para escribir. Cada vez que he encontrado conocidos por la calle he vuelto a sorprenderme cuando me decían; “sigo tu blog”. Yo inmediatamente respondía; “puedes escribir tu opinión”,a lo que normalmente respondían con evasivas.
La verdad es que lo entiendo. Entiendo el pudor, la pereza, el cansancio y hasta la anestesia, pero como esperaba en el mundo virtual las respuestas que no encuentro en el mundo real y no parece que vaya a ser así, esta entrada se convierte en el pequeño entierro, el discreto cortejo fúnebre, las plañideras falsamente desoladas de este blog. Quizás en un futuro me encontréis de nuevo volviéndoos a taladrar con mis juicios de valor exacerbados. De momento coloco una lápida sencilla y sin epitafio sobre este año que he compartido con vosotros.
Hasta pronto.
Vaya sorpresa Jordi... estos últimos días no he podido abrir siquiera el ordenador por “temas familiares agudos” y hoy que la tarde parece más tranquila, entre las dos o tres cosas que suelo mirar, he entrado en tu blog... (si como tantos te decimos y hacemos) y he leído tu despedida.
ResponderEliminarHoy tu adiós me provoca cierto enfado conmigo porque me doy cuenta de que el “exceso de pudor”, ha sido el principal motivo por el que me he frenado a dar más opiniones, y lo siento porque entiendo que igual que a mi me gusta leer tu opinión, a ti te tiene que gustar saber la opinión de quienes te leemos...
Me apena pensar que quizá las pocas respuestas hayan ayudado a que decidas dejar de mostrar tus opiniones, de sacar a primer plano temas y problemas que a veces pasan sin ser visto, o comentarios sobre cosas cotidianas que está bien recordar que existen.
Yo te doy las gracias por tus comentarios y tus fotografías (me gusta mucho como escribes y tu fotografía), porque tanto tus textos como tus imágenes en muchas ocasiones han aportado algo nuevo, una nueva mirada, una llamada de atención..
Espero que vuelvas a animarte a “taladrar con tus juicios de valor exacerbados” los tímpanos y las mentes de quienes te leemos y, que esa vez te acompañemos más.
Un beso y até a próxima.. ya sabes, cuando vengas por Madrid, aquí estaremos..
Yo creo que te equivocas. Pero crecí viendo a diario un cartel de Chaplin con la leyenda: Me gustan mis errores y no quiero renunciar a la libertad deliciosa de equivocarme.
ResponderEliminarEl problema, como casi siempre, son las espectativas. Yo procuro mantenerlas siempre a un nivel bajo. Así es mucho más complicado llegar a sentirse defraudado.
Por otro lado... tienes 27 seguidores, que a ti te parecerán pocos (y seguramente te merecerás más) pero a mí me parecen muchísimos (cosas del punto de vista). Además las catorce mil visitas son otros tantos comentarios anónimos, unos dicen: Pasé por aquí a verte, otros, me acordé de ti.
En fin... un año no es nada, ¿no merece la pena replantearselo?. Encontrar un formato en el que te encuentres cómodo y perseverar. Hoy en día se abandona a la primera piedra que nos sale al camino. Abandonar es de gallinas.
Un beso Jordi y a ver si pasas por Ruzafa, que tengo una botella de vino para abrir que lleva tu nombre.
Hola Jordi... nadie debe llorar por el fin de un recorrido, porque no es nada más que un paso más en el total de nuestro devenir (que cursi).
ResponderEliminarPero es cierto. El que piense que cualquier proyecto es para que dure eternamente, está condenado al fracaso. Yo comencé un blog sobre música vocal y tan sólo tiene la entrada inicial, con una bonita declaración de intenciones.
Y por descontado que toda la carne que pusiste en el asador para que este blog fuera, te aseguro que ha servido para algo.
Fijate, por tí me llego la partida de nuestra querida Rosa, y mi mente voló a media docena de recuerdos compartidos (no tengo más) pero de gran fuerza. O a aquella breve relación con la peli de tu abuela.
Si a mi me sirvió, tu lo tienes que multiplicar por los 14.000 que asomaron la nariz. Algunos tan sólo olisquearon. Otros disfrutamos con el paisaje y los comentarios. Algunos hicimos algún apunte más personal que vinculado a lo publicado, pero creo que nadie salió defraudado o indiferente.
Nuevas historias vendrán, en red, en directo, o en forma de corto, pero vendrán.
Un abrazote enorme
vi100-garzon
Gracias por cada frase. Perdón por cada silencio. Aún tenemos historias a medias. Te quiero.
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